¡Tolerancia! Necesitas cultivar la virtud de la tolerancia, que se alimenta de la virtud de la paciencia. Es vital en tus relaciones los colegas, con los pacientes, con tu familia misma. Haz actos repetitivos de paciencia, de autocontrol: callar cuando lo que quieres es explotar, saber respetar en el trafico en el banco ... Detente un poco para actuar. En segundos ¡un arrebato puede cambiar tu vida!
La vida del médico suele ser muy difícil, una explosión de mal carácter puede dañar la vida de otros como: seres queridos, amigos y colegas y sobre todo al motivo de nuestra existencia nuestro PACIENTE.
En resumen son 2 virtudes que juntas nos hacen ser médicos, seres humanos al servicio de los demás.
Santa Ana, 13 de Octubre del 2021.
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