Antiguamente consideraba que tenía un final de la adolescencia e inicio de la vida adulta.
Hoy me da risa esta creencia ya que primero me di cuenta que el desarrollo no para nunca termina hasta morirnos, hoy se que ya no crecemos en tamaño pero si en conexiones entre nuestras neuronas, estamos hechos por lo tanto para crecer y desarrollarnos hasta nuestra muerte, lo único que lo para es el Alzheimer un proceso involutivo que va borrando la memoria.
Entonces seguimos el camino que iniciamos un día con la unión de un ovulo y un espermatozoide y que termina con nuestra muerte biológica.
Todos los días crecemos en conocimientos y experiencias, lo que si disminuye es la masa muscular y la velocidad para desplazarnos y ayudas como un bastón o una andadera.
La capacidad de pensar no desaparece, de analizar tampoco y por lo tanto sacar conclusiones y poder crear, personas de la tercera edad que desarrollan capacidad para hacer labores carpintería, pintura, otro idioma, administrar empresas etc..
La vida no termina con la jubilación esa es la razón por la cual la mayoría de jubilados mueren poco tiempo después de la jubilación, mueren de depresión por no saber que hacer y aún sentirse útiles.
Santa Ana, 7 de Noviembre del 2018.
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