domingo, 21 de octubre de 2018

Recuerdo de Pacientes

No recuerdo a mis paciente por sus nombres y apellidos, lo hago por momento vividos con ellos.

Contaré los más sobresalientes un buen día por la madrugada suena mi teléfono y medio dormido lo contesto y me dice no se si acordará de mi pero soy la mamá de un paciente suyo me da el nombre y ni por asomo me recuerdo de él, le voy a decir lo siguiente cuando estaba pequeño me lo ingresó por deshidratación en Centro Médico y usted le decía el come plumas, en ese momento recordé quien era y las angustias que pasamos juntos, lo veo como que fuera este día y todos los detalles.

Fui llamado a CM por el colega de turno una noche y al llegar me encuentro a un niño de 9 meses con una choque por diarrea se le calcularon los líquidos y se dio la primera carga, se necesitaron 3 cargas más para sacarlo del choque con lo que respiré más tranquilo.

La diarrea persistía como la fiebre y los exámenes no orientaban a una infección bacteriana así que a pesar de ello lo cubrí con los antibióticos más potentes en esa época pero hicieron lo que el viento a Juárez, desesperado y luchando una mañana la mamá me cuenta que al evacuar expulsó una pluma, la diarrea se curó y la fiebre desapareció.

¿Como un niño de 9 meses pudo ingerir una pluma? al preguntar a la madre su ocupación y a que se dedicaba mi dijo mi negocio es vender pollos despumados con lo que se aclaraba todo

Es importante saber a que se dedican los padres porque la enfermedad puede ser por el oficio o profesión de estos.

Santa Ana, 21 de Septiembre del 2018.

No hay comentarios:

Publicar un comentario