¿Qué queremos prologar la vida o
el sufrimiento?
Recuerdo que hace muchos años
recibí 48 horas de castigo por haber sacado a un niño de un paro
cadrio-pulmonar, me ha dolido toda la vida, porque una buena acción recibió tal
sanción, pero lo triste es lo siguiente: a la mañana siguiente sumamente
emocionado le dije al Residente primer paro que sale adelante, quiero que nos
situemos en 1968 era el año, no se contaba con gases arteriales, no teníamos
Ambu, el laringoscopio era para niños, no teníamos tubos endotraqueales, fuera
de respiración boca a boca y masaje cardíaco, adrenalina y la intrepidez de la
ignorancia y la juventud sumado al deseo de salvarlo, todo estaba en contra,
solo lo vio el residente y me dijo ¿idiota que hiciste? No te fijaste que era u
microcéfalo, ¿Qué va a ser del él? Tragué mi rabia, pero tenía razón, esta
espinita no me la he sacado, pero los humanos no nos fijamos mucho en esto y
luchamos como gatos panza arriba ante la muerte, como 6 meses después contaré
esta historia con todos los actores en primer lugar como un homenaje a un gran
amigo y para mí el más grande cirujano que he conocido el Dr. Mario Francisco
Duarte Linares (el Chino Duarte), estábamos en el internado rotatorio, tenía
ante mí a un cristío un niño con deshidratación severa (en ese tiempo de tercer
grado 15 % de pérdida de líquidos) con sepsis ya había intentado la disección
de vena y no la pude hacer, mordiendo mi orgullo lo llamé para que me ayudara,
cuando vio al niño me dijo Chepe los pacientes tienen derecho a morir, me enoje
pero tenía razón era mi orgullo no era el paciente.
La vida de nosotros los médicos
siempre anda en la cuerda floja, tenemos que decidir a cada rato es nuestro
orgullo o es el bien del paciente. El siguiente caso que comparto con ustedes,
posiblemente les parecerá duro, pero no olviden que lo más importante es el
paciente y es ante Dios que vamos a responder y al final solo el nos dirá venid
a mi benditos de mi padre, pero lo que importa es que nuestras decisiones sean
tomadas en beneficio de los seres a los que nos debemos.
Nace una niño de una madre de 17
años con una pareja estable de 21 años, nacen en el HNSJDDSA que es trasladad
al HNBB por ser de muy bajo peso, permaneciendo ingresada por 2 meses, se le da
el alta como PCI (parálisis cerebral infantil), quedando en estado vegetativo,
daño severo de cerebro, dificultad enorme para la alimentación por lo que se le
propone la práctica de de una gastrostomía con funduplicatura para evitar un reflujo gastro esofágico y es dada de alta, la madre la alimenta con
jeringa ya que la niña no succiona, llegando a nuestro departamento por cuadro
de Neumonía del lóbulo medio aparentemente por una broco- aspiración, pero
resulta que la niña tiene 1 año con 3 meses, pesa 5 kg y mide 65 c, franco
deterioro nutricional y baja talla, no sostiene la cabeza, podríamos decir llega
a lo sumo al desarrollo psicomotor de un niño de 1 mes. Pregunta que nos
formulamos: ¿El tratamiento que le ofrecemos que beneficios o daños le causará?
Tuvimos que ser francos: “Se le podrá
alimentar más fácilmente con lo que mejoraría su nutrición, al efectuar la
conduplicatura evitamos el reflujo gastro esofágico, posibilidad de Neumonía
aspirativa prácticamente 0, pero eso es todo, lo negativo tiene que preparar la
alimentación total enteral, que se la podemos diseñar a bajo costo por que
podemos utilizar Incaparina, huevo, arroz, verduras y frutas naturales baratas
y accesibles, nuestras Nutricionistas son muy capaces de hacerlo, cálculo de
los requerimientos líquidos y calóricos, el problema es que se puede contaminar
rápidamente y se puede tener refrigeradas las porciones y puede darse
calentadas, esto indudablemente requiere tiempo y dedicación de la familia, también
se debe de contar con el tiempo suficiente para la movilización pasiva y estimulación,
control por lo menos cada 15 días lo ideal semanal, diseño de un plan de
cuidados, el gran problema es que la madre se encuentra embarazada y lo más
probable que lo descuide por atender al hermano, todo esto se lo planteamos a
los padres y en última instancias que ellos decidan. Esta es la razón del título
del blog.
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